Tina Modotti nació el 17 de agosto de 1896 en Udine, al norte de Italia, hija de un mecánico y un ama de casa. A los 17 años emigra a Estados Unidos, desempeñándose desde los doce a los veintiún años en la industria textil (obrera, modista). A principios de los años veinte participó como actriz en películas silentes y luego trabajo como modelo de fotografía. Así conoce a Edward Weston, fotógrafo estadounidense que le alecciona en el uso de la cámara. En 1923 se radica en Ciudad de México, junto a Weston. En este periodo conoce varios políticos radicales y comunistas, y forja amistad con artistas mexicanos como Frida Kahlo, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros. En aquel momento, compromiso político y artístico eran una solo cosa, lo que desde luego influirá en la progresión de la obra de Modotti. Para 1926 Modotti ya daba a conocer su trabajo de modo constante en publicaciones izquierdistas (El Machete, AIZ New Masses, Puti Mopra) y en 1927, tras hacerse miembro del partido comunista, su trabajo adquiere un tono más político. Alcanza el zenit de su carrera en 1929, con una exhibición catalogada como “La primera exhibición fotográfica revolucionaria en México”. En 1930 es deportada, acusada de conspirar contra el presidente mexicano. En 1930 llega a Alemania y luego se establece en Moscú, uniéndose a una rama de la policía soviética. Motivada por intereses políticos llega a España, donde reside hasta 1939, año en el que regresa a México bajo un seudónimo. Muere en 1942 bajo circunstancias confusas, aunque la mayor parte de la información en español describe su muerte producto de un paro cardiaco.
Respecto de la obra de Modotti, el fotógrafo mexicano Manuel Álvarez Bravo plantea la existencia de dos periodos, uno romántico y uno revolucionario. El primero abarca el tiempo que pasó como asistente y luego como compañera creativa de Weston, con quien abrió un estudio para retratos en México. La influencia de Weston se aprecia en una composición cuidadosa, una fotografía directa, libre de detalles o anécdotas; cuida el encuadramiento y la limpieza de las formas. Rosa Casanova, Licenciada en Historia del Arte por la Universidad Iberoamericana, plantea que el trabajo de la fotógrafa hace un recorrido que va desde “la abstracción de elementos de la vida cotidiana al retrato, al registro y a la creación de símbolos” 2. Modotti comienza representando objetos, y luego pasa a representar la industrialización y modernidad arquitectónica. Su trabajo fue mutando a medida que definía más su postura política, adquiriendo sus fotografías un planteamiento social que no descuidó la calidad formal de sus obras. El periodo revolucionario se ejemplifica de modo preciso en la exhibición , anteriormente mencionada, de 1929. Para dicha ocasión escribe un manifiesto, en el que se percibe un alejamiento de los principios estéticos de Weston.
El trabajo de Modotti se relaciona con el de los muralistas mexicanos, con quienes compartía la percepción del México de esos años así como también una visión artística común, amalgama de las revoluciones mexicana y soviética, de la vanguardia y el nacionalismo. Esta visión compartida se aprecia en la representación de la naturaleza (por ejemplo maíz), del trabajo (por ejemplo machete), y del pueblo (por ejemplo, sombrero), así como también en la exaltación del socialismo (que muestra oposición de clases sociales, enaltecimiento de los trabajadores). Estos temas se repiten y encuentran matices surgiendo imágenes de campesinos, niños (en la foto Niños Bañandose en el río,1929), manos de trabajadores, entre otras.
Tina Modotti cultivaba la verdad en sus fotografías. En sus palabras “yo precisamente trato de producir no arte, sino fotografías honradas”3 refleja el rechazo de los artefactos y de las pretensiones, que parecían parte de una fotografía con “complejo de inferioridad”. Esto se debe a que se vivía un periodo decisivo para la fotografía: se discutía su validación o no como medio de arte. Desde este punto de vista, el uso de técnicas efectistas que intentan imitar técnicas plásticas estaría negarían la fotografía como obra de arte. Para Modotti lo que toda obra debe tener es calidad fotográfica. Para ella, una buena fotografía es aquella que “acepta todas las limitaciones inherentes a la técnica fotográfica y aprovecha todas las posibilidades y características que el medio ofrece”.
Referencias
Fotografías
Respecto de la obra de Modotti, el fotógrafo mexicano Manuel Álvarez Bravo plantea la existencia de dos periodos, uno romántico y uno revolucionario. El primero abarca el tiempo que pasó como asistente y luego como compañera creativa de Weston, con quien abrió un estudio para retratos en México. La influencia de Weston se aprecia en una composición cuidadosa, una fotografía directa, libre de detalles o anécdotas; cuida el encuadramiento y la limpieza de las formas. Rosa Casanova, Licenciada en Historia del Arte por la Universidad Iberoamericana, plantea que el trabajo de la fotógrafa hace un recorrido que va desde “la abstracción de elementos de la vida cotidiana al retrato, al registro y a la creación de símbolos” 2. Modotti comienza representando objetos, y luego pasa a representar la industrialización y modernidad arquitectónica. Su trabajo fue mutando a medida que definía más su postura política, adquiriendo sus fotografías un planteamiento social que no descuidó la calidad formal de sus obras. El periodo revolucionario se ejemplifica de modo preciso en la exhibición , anteriormente mencionada, de 1929. Para dicha ocasión escribe un manifiesto, en el que se percibe un alejamiento de los principios estéticos de Weston.
El trabajo de Modotti se relaciona con el de los muralistas mexicanos, con quienes compartía la percepción del México de esos años así como también una visión artística común, amalgama de las revoluciones mexicana y soviética, de la vanguardia y el nacionalismo. Esta visión compartida se aprecia en la representación de la naturaleza (por ejemplo maíz), del trabajo (por ejemplo machete), y del pueblo (por ejemplo, sombrero), así como también en la exaltación del socialismo (que muestra oposición de clases sociales, enaltecimiento de los trabajadores). Estos temas se repiten y encuentran matices surgiendo imágenes de campesinos, niños (en la foto Niños Bañandose en el río,1929), manos de trabajadores, entre otras.
Tina Modotti cultivaba la verdad en sus fotografías. En sus palabras “yo precisamente trato de producir no arte, sino fotografías honradas”3 refleja el rechazo de los artefactos y de las pretensiones, que parecían parte de una fotografía con “complejo de inferioridad”. Esto se debe a que se vivía un periodo decisivo para la fotografía: se discutía su validación o no como medio de arte. Desde este punto de vista, el uso de técnicas efectistas que intentan imitar técnicas plásticas estaría negarían la fotografía como obra de arte. Para Modotti lo que toda obra debe tener es calidad fotográfica. Para ella, una buena fotografía es aquella que “acepta todas las limitaciones inherentes a la técnica fotográfica y aprovecha todas las posibilidades y características que el medio ofrece”.
Referencias
- Documento de Wikipedia en inglés, mayor cantidad de referencias que en español http://en.wikipedia.org/wiki/Tina_Modotti
- Texto de Rosa Casanova, Licenciada en Historia del Arte Universidad Iberoamericana en http://www.mexicodesconocido.com.mx/espanol/cultura_y_sociedad/personajes
- Texto elaborado por Tina Modotti para la exposición de 1929 en Revista Poética en http://www.librodenotas.com/almacen/Archivos/003588.html
- Tina Modotti y el muralismo, un lenguaje común en http://www.analesiie.unam.mx/pdf/78_175-188.pdf
Fotografías
- Fotografía izquierda extraída de George Eastman Househttp://www.eastman.org/ar/strip87/htmlsrc3/modotti_sld00001.html
- Fotografía derecha extraída dehttp://www.comitatotinamodotti.it/ini.htm